El vacío y los días.

Arte de proceso duracional y performance

10 días/55 horas. Galería del Teatro Peón Contreras

Del 10 al 19 de septiembre 2025

...Las charlas y el laboratorio que impartí en la Facultad de Artes de la Universidad de Yucatán tuvieron buena resonancia en los estudiantes de esta y otras escuelas, que varias personas interesadas y hasta concernidas por las temáticas acudieron al proceso cada vez en mayor número y, algunas de ellas, varias veces a lo largo del proceso. Llegaron a ubicarse en ese lugar abierto al delicado y doloroso asunto del suicidio. Lo que me hizo pensar en la falta que hacen estos espacios donde se pueda abordar dicho tema. Por otro lado, me di cuenta del potencial del arte conceptual, en particular, las estrategias del arte acción para introducir un lugar que aloje demandas de escucha y manifestaciones emocionales todavía estigmatizadas en nuestras sociedades. 

Las personas concernidas con la experiencia del suicidio, directa o indirectamente, descubren un punto de encuentro con algo diferente a los discursos regulares que suelen haber alrededor. Considero que esto fue de gran éxito en mi obra: hacer que la gente la hiciera suya, dentro de términos conceptuales casi sin narrativa ni discurso, sin direcciones ni juicios. La interpretación de la gente contaba más que todos mis argumentos al respecto. Aunque a la hora de que alguien preguntaba algo o quería que se le explicara la obra o algo del tema, yo, a través de formulaciones sencillas, les daba la palabra para que manifestaran su pensar y sentir respecto a lo que preguntaban. Muchos se sorprendían, pero tomaban el reto. Mi escucha atenta ⸻sin fingir empatía, sino escuchándoles en verdad⸻ daba valor a sus palabras, ideas e interpretaciones. Entonces, para mi alegría, se abría un diálogo, apoyado mayormente en aspectos de la obra que estaba realizando. Hilos, globos, flores, textos cortados, palabras separadas de su texto, lecturas en reversa del texto, repeticiones de palabras, actos, gestos, etcétera, como elementos de un ejercicio conceptual de deconstrucción y hasta filosófico a través del diálogo. La obra era la realidad inmediata simple, pero contundente. Varias personas traían a jugar cartas dolorosas en este diálogo, querían hablarme de su experiencia sobre el suicidio o algo que sufrieron que les hizo pensar en ello. Hubo quien me llegó a contar que llevaba muchos años luchando por guardar un equilibrio entre la vida y la muerte suicida. Aquí ya entraba a un terreno que hubiera sido ideal para un psicólogo, no es mi profesión, mas sí facilito un terreno donde escuchar es fundamental para alojar un discurso que trata de resolver algo. Fui artista y escuché. Y sigo interesada en tratar de comprender de dónde viene esto que actualmente con irresponsabilidad llamamos enfermedades mentales.

Dia 1/ 10 horas

Dia 2/ 9 horas

Dia 3/ 8 horas

Dia 4/ 7 horas