A pesar de que el performance es la forma del arte-acción más conocidas y aceptada en el mundo, existen otras basadas contundentemente en el manejo del tiempo, el espacio/lugar y la presencia. Estas obras apuntan a la creación de temporalidades rebeldes, obras situacionales o eventos poéticos en diversos contextos. Tienen el potencial de ser un detonador de la participación activa del espectador y funcionar como punto de encuentro, mesa de diálogo y debate. Su carácter temporal y efímero reitera la importancia del tiempo humano y de los valores ético-estéticos que dan forma a nuestras relaciones humanas, con la naturaleza y con el mundo en general. Estas obras aspiran a ser experiencias vivenciales basadas en el poder conceptual y la empatía corporal a través de la presencia directa del artista en situación real. También son generadoras de un saber; un laboratorio de procesos de la conciencia humana.

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Elvira Santamaría  2014

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